sábado, 25 de octubre de 2008
[la noche mas incierta]
Noche de sueño compartido por dos caminantes, mojados por las lágrimas de los dioses en la ilusión de encontrar la sensación justa que supere todo sentimiento que nos da el empuje a algo mas, sea dolor o una momentánea felicidad artificial, química o naturalmente producida e inducida.
Pules para armar, sobre la mesa caen las gotas de agua de nuestros trapos, esos que nunca nos podremos sacar, las bolas ruedas y las risas también, la música apesta, la tiza se mezcla con el humo y nuestros pulmones ya no saben lo que es el aire. Ya conocemos esa sensación, necesitamos mas.
Partimos a otro tumulto de sedientas lenguas, ojos, oídos y piel. La rueda comienza a girar a nuestro favor, las conexiones hacia nosotros vienen pero cuando todo esta por terminar con un final feliz, seguimos mojados por aquellas lagrimas de soledad que borraron sus intenciones hacia nuestros sedientos cuerpos. Las arenas del tiempo se detienen a cada instante para reflexionar sobre el paradero de nuestras mentes. Así, minuto a minuto recorremos la ya explorada situación que en tiempos pasados fueron similares a esta. Nuestras mentes se diluyen con el solo pensar en el fin de este recorrido nocturno e incierto. Entre miradas nos reímos, entre miradas nos callamos, entre miradas nos entendemos; cada momento es distinto al anterior, por el cual vagamos sin rumbo predefinido, por el cual naufragamos sin conocimiento alguno de las sensaciones, acciones o el mismo sentir, que una vez mas abarca la esperanza de cada uno de nosotros por conseguir alejarse del grupo y unirse con otro individuo, aunque no perdure por mas tiempo que en lo que tarde en volver a llenarse el vaso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario