Cada vez que te veía en persona sentía tanto amor que me inmovilizaba, transpiraba como si me fueras a matar, sabía que estaba perdidamente enamorada de ti pero no lograba expresarlo más que con este pánico de haberte encontrado. Paradójicamente ese “pánico” me alejó de ti, nunca pude mostrarte mi verdad, mi ser, mi verdadero espíritu. (dices) Deseaba locamente estar enamorada... Lo estuve… y no pude manejarlo…. risas nerviosas, fría transpiración e inevitable desesperación. por tocarte, besarte, mimarte y demostrarte que ya no tenía esta maldición.(dices) Los dos sabíamos muy bien que era inmanejable, el verdadero amor no debería ser incontrolable. Hasta que… encontraste esa persona tranquila, devota, amable y maleable… Para mí… Altamente despreciable.(ja!) No sólo un casamiento, sino también te dio un hijo… Y yo acá… sin saber ésta vez que camino elijo. Y yo estoy acá deseando encontrarte de nuevo, distinto y en otro cuerpo, pero de nuevo al fin.
Y yo sigo acá esperando que llegues algún día…
Con hijo, sin hijo, con ella, sin ella, pero por fin nuevamente mío, y ésta vez no tengo rimas, ni palabras hermosas, ni metáforas que embellezcan la pura verdad de mi corazón envuelto en esta soledad.
Lo único que sé es que a esta vida vine para amar.
no hay manera de volver atrás, pero sí de encontrar otro amor invisible y volver a intentar.( dices)
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