domingo, 18 de enero de 2009

[ cansada ]


No puede salir bien, no va a salir bien, esto esta mal parido, y la hombre esta madurando su venganza, yo lo se, lo saben las polillas, todos lo saben, qué es esto de no dormir, no dormir, no duermo, pero no quiero nada, nada anhelo, o una muerte plácida, o una vigilia eterna frente al espejo de los temores de otros personas, los míos, todos los miedos, señores miedos, torcidos miedos, me cago en los miedos, qué es el miedo, hay vida y muerte, el miedo dónde lo metieron, ni miedo, solo insomnio, aburrimiento, dependencia, azúcar, café, rubios, morochos, de todos los colores, siempre hay opciones, sin talento, todo muere, y me conformo con escucharte en lo parecido que no es igual, que no es lo mismo, que no es nada, que es un sueño enroscado, nervioso, vagabundo, vagabundeando, muecas, poses, facciones sin terminar, te deje dos veces, dos veces, sin tenerte, sin nada, sin mi, sin ti, y diez millones de opiniones, el bosque, la nieve, el puma, la sangre, el disparo, la sangre y el cuchillo, y se terminó.
Una escalera caracol me lleva hacia la estancia primera de los mil reproches y veo tu cara en mi mente, y una sonrisa sin terminar y así todo. Un nuevo germen en mi vida, lo inacabado, lo inconcluso, lo estéril, lo no logrado, …me apuro a terminar con todo, como como una vaca tuerta, alfalfa para el idiota, me apuro por terminar. No se llega nunca, nunca llego, nunca llegare, llegar nunca, ¿y los sueños, por qué los sueños, por qué en los sueños, por qué dormida, por qué atontada, me pierdo, como tu y no.
Estoy balbuciendo entre irme a dormir y seguir tartamudeando esto con los ojos cerrados o ir a quemarme la cara con el sol, las polillas muertas y los detectives aterradores de la ciudad, hoy odio todo, te odio, odio a el y a ella y a mi, y odio, y no paro de odiar, pero matarme no parará el odio, matarte tampoco, matarla, parará si la mato, no, seguirá, va a seguir aunque no mate a nadie, me conformo con las polillas, así de mediocre resulte, un poco mas de cincuenta polillas y que van a decir los locos cuando me encuentre doblada, desnuda, babeando, en mi cuarto de niña vieja, qué mierda dirán de mi los empleados del supermercado, era solo un puto boleto y se perdió, eso dirán, y tendrán razón, pero no puedo morir ahora, tengo puestos la truza ridícula, esto tampoco podrá terminar bien, creeme, estoy cansada.

domingo, 4 de enero de 2009

[ luna llena ]


En luna llena empezando enteramente incluso,
como quizá en los tiempos no fue nunca descrito,
se destriparon los tiempos emborrachados de noche,
bosques secos al andar pisaron una rama andando al tiempo.

Fue un hecho concreto lo que abandonó el sentido a la vida;
oportuno era el silencio; la paz oportuna;
mas la oscuridad influía tal hechizo,
que no intento a notar el nombre complaciente.

Bendición frívola de los seres que se aman; satisfacción
la que genera las caricias, entrelazadas entre si, oliendo a victoria,
no me determinen como irrespetuosa al disolverme en su orgasmo.

Sombras, extasiadas en mi mente, laberinto casi absurdo,
extirpar sus adentros con mi agitación, o, morir en el intento,
ser fiel a sus pupilas, tener su alma dentro.